Empresarios reconocen que habrá que reabrir paritarias aunque buscan dilatar la decisión

Quieren ganar tiempo y ofrecer menos aumento

Los empresarios reconocen que será necesario reabrir las paritarias ante el pronunciado deterioro del poder adquisitivo, aunque advierten que lo intentarán postergar todo lo posible, probablemente entrado el 2019, y evitar una mayor demanda salarial por parte de los sindicatos.

Por la devaluación, los precios cerrarán diciembre más de 45% por encima del año pasado, mientras que los gremios cerraron acuerdos que con suerte llegaron al 25%. Los ejecutivos entienden que para contener el derrumbe del consumo deberán ponerse a negociar con los gremios en el marco de las "cláusulas de revisión" que se incorporaron al firmarse los aumentos.

Esta fue una de las preocupaciones que se mencionaba por lo bajo en los pasillos del Hotel Sheraton de Mar del Plata, en el 54° Coloquio de Idea que finalizó el viernes.

Los hombres de negocios estiman que en promedio los salarios formales cerrarán el 2018 con un avance del 30% nominal y en algún momento tendrán que ceder algún incremento extra para morigerar la magnitud del hachazo recibido por sus propios empleados.

"Tendremos que sentarnos a renegociar sin duda en el 2019", dijo Luis Galli, CEO de Newsan. La empresa firmó un acuerdo "de paz social" con la UOM en Tierra del Fuego para congelar las plantas y no despedir trabajadores.

En tanto, Juan Pablo Quiroga, gerente de Institucionales de Walmart apuntó que "este año se cerrará el ajuste salarial en base al convenio de Comercio" y que la discusión de 2019 comenzará con la cláusula de revisión, para recomponer parte de lo perdido en 2018, más el acuerdo base tradicional.

En estos temas, más cauteloso, el presidente de Fiat Argentina Cristiano Rattazzi consideró que "no podemos andar por el mundo diciendo que un obrero acá puede ganar el doble". "Depende de qué mercado tengamos y de lo que cada empresa pueda soportar", evaluó el empresario automotriz en referencia a los eventuales incrementos salariales. "Se dejó bien en claro que nos tenemos que poner a trabajar en los costos de todo el sistema para que sea competitivo", añadió.

Mientras tanto, otros de los ejecutivos planteaban una estrategia de estirar el ajuste todo lo posible porque creen que si empiezan a ceder ahora, los gremios irán por más, por lo que así podrían "vender" como positivo un porcentaje bajo, ya entrado el año que viene.

Algo similar ocurre con el empleo. Varias de las compañías que acudieron al Coloquio debieron postergar algunos meses el ingreso de personal previsto para diciembre, a la espera de una mayor estabilidad macroeconómica que, dicen, podría llegar en marzo con la cosecha y alguna recuperación en los salarios reales.